miércoles, 17 de noviembre de 2010

Cuisine Erasmus: "Ratatouille"

Salut mes petits!

Hoy os traigo una nueva entrada para mi sección "Cuisine Erasmus" ^^.

En esta ocasión os presento uno de los platos más famosos del sur de Francia: la ratatouille. Aunque su nombre nos recuerde al simpático personaje de Disney, en realidad se trata de un plato muy sano a base de verduras de la huerta mediterránea.

Comencemos.

Para 2-3 raciones necesitamos:

- 1/2 berenjena
- 1 calabacín
- 1 pimiento verde
- 1 pimiento rojo
- 2 tomates
- 1 cebolla grande (o dos pequeñas)
- Aceite de oliva, sal, pimienta e hierbas provenzales.


(Las proporciones están indicadas siguiendo mi propio criterio, pero podemos añadir tantas verduras como gustemos y en la cantidad que prefiramos).

Lo primero que debemos hacer es cortar las verduras. Al contrario que en el pisto manchego, es preferible partirlas en trozos bastante groseros. De esta manera seremos capaces de apreciar mejor los sabores de cada ingrediente.

Es importante respetar el orden en el que vamos añadiendo los ingredientes, ya que está en función del tiempo de cocción que cada verdura requiere.
Así, comenzaremos añadiendo a nuestra cacerola (en la que ya tendremos 3 cucharadas soperas de aceite caliente) la cebolla y los pimientos. Salpimentamos, tapamos y dejamos cocer.
Pasados unos diez minutos incorporamos el calabacín cortado en discos. Volvemos a salpimentar, removemos un poco y tapamos de nuevo la cacerola para que las verduras suden.
Por último, añadimos la berenjena y los tomates. Éstos últimos aportarán el jugo al plato una vez que estén bien cocinados. También es recomendable incorporar un último chorreón de aceite de oliva, pero nunca en exceso.
Ahora sólo queda rociar nuestro ratatouille con hierbas provenzales al gusto y dejar que el plato se cocine a fuego lento durante una hora aproximadamente. Cada 15-20 minutos daremos unas vueltas para evitar que se pegue a la cacerola y comprobar que no queda muy seco.
El secreto de la ratatouille (como el de la mayoría de los platos de la cocina tradicional) es poner mucha paciencia y cuidado durante toda la elaboración, y sobre todo dejar que se cocine "a su amor".


En los supermercados podemos encontrar ratatouille envasado al vacío, pero una vez que hemos probado el hecho en casa comprobaremos el abismo que hay entre uno y otro en lo que a sabor y frescura se refiere.
Es un acompañamiento ideal para todo tipo de comidas (arroz, sémola, pasta, carne, pescado...), que apenas lleva grasa y además muy nutritivo.
A mí particularmente me gusta comerlo con un huevo frito encima, os aconsejo que lo probéis! :)
Bon appetit!

miércoles, 10 de noviembre de 2010

París, siempre París...

































Definitivamente, París es la ciudad a la que llevaría a la persona de la que no querría separarme hasta el final de mis días.